Independiente a todos los titulares, a los comentarios periodísticos que como siempre llegan cual hiena en busca de carroña.
Independiente además, a los comentarios que ya comienzan a surgir en el exterior, lo que verdaderamente da tristeza, es la indiferencia con la que hemos tratados los mismos problemas de antaño y que como el titular, por todos eran conocidos.
En cada estamento del gobierno, se empiezan a destapar "ollas podridas" que bien podrían llenar cualquiera de los estadios reformados para el próximo Mundial. (acaso acá también hubo "tumbes"?).
Las cadenas del desfalco son inmensas, y apenas se están conociendo empresas, sitios y nombres de los rateros.
Pero cabe una pregunta o mejor, dos:
Estamos en esta era, experimentando con las reelecciones del gobierno de turno.
Será que 8 años son más que 2 y hay más tiempo para desarrollar maquinarias y estrategias de robo??
Por qué no se investigan así como se hace en el gobierno central, todos y cada uno de los municipios del país, para ver que encontramos?
Cómo algún día dijo un periodista de un noticiero local (Lao Herrera), sólo falta que a Colombia, le "tiren una cerca de alambre de púas, por todas sus fronteras y nos encierren a todos".
Definitivamente, el apaga y vámonos y el último cierra la puerta.
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