nos hicieron bajar de la nube de las posibilidades y nos mostraron las falencias que tenemos en forma cruda.
Las derrotas ante Uruguay como local y la goleada ante Chile en Santiago, hicieron que la afición en forma inmediata pidiera la cabeza del director técnico Pinto.
El periodismo ha dicho que el grupo a su interior esta reventado. Que las relaciones de un grupo de jugadores con el técnico son insostenibles y que la disciplina casi que militar que quiere imponer el entrenador no es tolerada por el grupo.
Lo cierto es que a estas alturas de la eliminatoria no podemos reventar lo poco que quede y agotar las posibilidades que aún mantenemos de clasificar al mundial.
Pinto en los equipos que ha dirigido ha denotado siempre una disciplina que hace cumplir a toda costa.
Siempre ha sido un trabajador incansable y aunque no estemos de acuerdo con él en sus planteamientos nunca podremos decir que no ha dado la cara en los momentos difíciles.
No es el momento de atacar con todo al equipo.
Debemos entender que es lo que tenemos y que los jugadores que fueron llamados son los mejores en la actualidad.
Nos acostumbrados en tiempos anteriores a lo que tuvimos y debemos entender que esa generación futbolística, ya se acabó. no va más y que por cualquier circunstancia no hubo un recambio adecuado y como dijimos alguna vez, tendrán que pasar muchos años y trabajar con toda la seriedad posible para que la camada de jugadores que podamos reunir se parezca a la de la década del 90".
Esperemos un mes para ver que se ha mejorado en la tranquilidad que debe dar que todavía existe una remota posibilidad de ir al mundial.
Se vienen Paraguay y Brasil, y estos serán un buen termómetro, para medir nuestro trabajo, y ojalá esperar pasar un final de año con la tranquilidad de saber que todavía estamos en carrera.
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