Sigue la Iglesia Católica en el "ojo del huracán".
Después de los problemas ocasionados por el Arzobispo Presidente de Paraguay, al que le han endilgado ya tres hijos y se esperan noticias de "otros municipios", ahora un símbolo de la iglesia latina en Miami, ha aparecido en varias fotos comprometedoras con una dama en las playas de esta ciudad americana.
Este cura tiene desde hace años un programa de TV que es alto en rating de sintonía y además es párroco de una diócesis de las mas concurridas.
Al ser sorprendido y sacar la iglesia un comunicado, cesándolo de sus labores, el Padre Alberto dió declaraciones por los medios, donde ratificaba el hecho y además ponía el dedo en la "llaga" al decir que el CELIBATO debía ser abolido de las obligaciones de los sacerdotes.
La Iglesia desde hace tiempos cayó en una displicencia de cambio y al ser única, se durmió en sus laureles ya que cuando no se tiene competencia no se "pellizca" el interesado.
Es absurdo que al estar saliendo casos en forma permanente, no se haya suprimido el celibato y se acepte que los sacerdotes se casen para cumplir con el mismo precepto de procrear que ellos predican.
Hay varios factores que de pronto hacen que no sea tomada la decisión.
Al estar casado el cura, automáticamente tiene que responder por una familia con todo lo que esto representa.
Tiene que tener asegurada la salud, la educación y la alimentación de todos ellos.
En la actualidad, el cura del barrio vive como rey con lo que recolecta en las misa y le queda para mandar dinero al Vaticano a las arcas centrales.
Cómo sería en el nuevo estado?
Ya lo recogido no alcanzaría y sería como un trabajador cualquiera que devenga un sueldo y de ese, tiene que sacar los gato para la familia.
El estudio de los hijos con lo costoso que es, representaría otro problema económico para el cura.
Al fallecer el sacerdote, la viuda quedaría con los gastos y la Iglesia hasta sería responsable de los gastos de quién en vida le prestaba sus servicios.
No es fácil el tema pero es necesario abordarlo y dar fin a un estado que no tiene razón de ser.
Los curas son como los pastores de la demás iglesias, y los que van a escuchar sus palabras, de seguro estarán más tranquilos al tener al frente a una persona igual que ellos y con los mismos problemas que ellos.
Se acabarían las murmuraciones sobre los "sobrinos de monseñor"y podría hacer su vida a la luz de la comunidad dando el ejemplo que ahora sólo predica pero no puede dar fé de él al no conocerlo desde el otro lado del campo.
Ya podría hablar de cómo criar a los hijos y cómo tratar a la familia ya que viviría los mismos problemas de todos los mortales.
Esperemos los acontecimientos para ver si este suceso salido a la luz pública, que es sólo uno de los miles que habrá en el mundo, ocasiona el cambio de actitud que todos esperan.
El "paparazzi"que tómo las fotos comprometedoras, quizás y sin saberlo inició un cambio que mas adelante será histórico.
Que escogerán los jerarcas de la Iglesia?
Permitir el homosexualismo de la actualidad entre sus predicadores o aceptar que son seres humanos como cualquiera y que tienen deseos como todo cualquiera.?
El mundo espera de seguro la decisión de las altas esferas curales.